Auto-concepto
De acuerdo con Harter (1990) citado por Amezcua, J
y Pichardo, M.& Feldman, R (2000:207) el autoconcepto se refiere a las percepciones que
tiene el individuo sobre sí mismo; similarmente, Kalish (1983) citado por
Amezcua, J y Pichardo, M. (2000:207) considera que el auto-concepto se puede
definir como la imagen que cada sujeto tiene de su persona, reflejando sus
experiencias y los modos en que estas experiencias se interpretan. El autoconcepto podría ser también “un
constructo psicológico definido como un conjunto de ideas y sentimientos que la
persona tiene acerca de si mismo (Castillo, Santander y Solís. 2015:252).
Desarrollo
del auto-concepto según paplia.
·
Alrededor
de los 6 u 8 años el infante entra en la
tercera etapa neopiagtiana del desarrollo del auto-concepto. Según la autora la
tercera etapa de en el desarrollo de la autodefinición es caracterizada por la
amplitud, equilibrio e integración y evaluación de diversos aspectos del yo.
·
Los
juicios acerca del Yo se vuelven más realistas y equilibrados a medida que los
niños forman sistemas representacionales: auto-conceptos amplios e incluyentes
que integran diversos aspectos del yo (Harter, 1993, 1996, 1998, como se citó en Papatia et al., 2009:423).
Autoestima
La autoestima es la “perspectiva de los niños
acerca de su capacidad para el trabajo productivo” (Erikson, 1982 citado por
Papalia et al., 2009:423). De igual
manera y teniendo en cuenta lo postulado por Castillo et al (2015:252) la autoestima puede ser definida como “la magnitud
en que se valoran las ideas y actitudes de sí mismo.
Crisis del crecimiento según Erikson.
En esta edad el infante se encuentra en la “etapa” industria vs. Inferioridad, esta es
conocida como la cuarta (4) etapa del desarrollo psicolsocial planteado por
Erik Erikson, en ésta etapa, los niños y niñas deben aprender las habilidades
productivas que requiere su cultura o enfrentar sentimientos de inferioridad
(Papalia et al., 2009)
Crecimiento emocional según Papalia et
al (2009:424).
A medida
que los niños crecen, están más conscientes de sus sentimientos y de los de
otras personas. Pueden regular mejor sus emociones y pueden responder a la
angustia emocional de los demás (Saarni et al. 1998 como se citó en Papalia et al., 2009:424)
Caracteristicas del crecimiento emocional:
·
Se
adquiere consciencia de sentimientos como vergüenza y orgullo. (Harris, Olthof, Meerum Terwogt y Hardman, 1987; Olthof, Schouten,
Kuiper, Stegge y Jennekens-Schinkel, 2000 como se citó en Papalia et al., 2009:424).
·
Se tiene
consciencia de las reglas culturales (Cole, Bruschi y Tamang, 2002 como se
citó en Papalia et al., 2009:424).
·
Se
aprende a adaptarse al comportamiento del otro.
Familia
Concepto
de familia
Tomando en cuenta lo expuesto por Cano y
Casado (2015) en su artículo “Escuela y familia. Dos pilares fundamentales para
unas buenas prácticas de orientación educativa a través de las escuelas de
padres” puede definirse la “familia” de la siguiente manera.
El concepto de
familia, desde una perspectiva muy general, se refiere a un conjunto de
personas unidas por lazos de herencia genética, consanguinidad, afectos,
cuidado, apoyo y vivencias compartidas que, bajo la custodia de unos padres, se
constituye en el eje generatriz de la sociedad, cuyo rol trascendental supera
la satisfacción de las necesidades básicas de sus integrantes, centrando su
atención en la transmisión de una educación fundamentada en valores educativos
y culturales (Cano y Casado., 2015, p.90).
Función de la
familia
La familia tiene
4 funciones básicas expuestas por Ontaneda (2016) las cuales son:
·
Función
biosocial: Ésta propicia la estabilidad conyugal de la pareja y con ello el
establecimiento de patrones de conducta adecuados de fácil trasmisión al
infante, a fin de sentar las bases para la seguridad emocional e identificación
de éstos con la familia
·
Funcion
económica: Garantiza la satisfacción de las necesidades materiales,
individuales y colectivas, matizadas por el sentido de pertenencia de cada
integrante de la familia.
·
Función
cultural y afectiva: la parte cultural se encuentra relacionada con los valores
sociales transmitidos por la familia y las actividades de tiempo libre que
transcurren dentro o fuera del hogar. Y la afectiva se apoya en dos pilares
fundamentales: el vínculo afectivo y la adquisición de confianza básica; ésta
ofrece elementos que facilitan construir el concepto de sí mismo y la
autonomía.
·
Función
educatica: Facilita la forma de enseñar en la cotidianidad familiar, en ésta la
comunicación adquiere particular importancia por la influencia que ejerce en
los motivos, valores y decisiones de sus miembros”
El
niño en familia
A pesar de que
el tiempo en familia en esta edad (6 a 12 años) es menor al que se solía tener
en las etapas del desarrollo anteriores, la familia sigue siendo se suma
importancia para el desarrollo psicosocial, ya que esta influye en la conducta
y en los papeles (roles) que el infante empleara más adelante. Para entender al
niño dentro de la familia necesitamos examinar el ambiente familiar —su
atmósfera y estructura—. (Papalia et al.,
2009). De igual manera para poder examinar el ambiente familiar se debe tener
en cuenta todos aquellos “fenómenos” socioculturales en los cuales se encuentra
sumergido dicha familia. Como pronostica la teoría de Bron-fenbrenner, las
capas más amplias de influencia —incluyendo el trabajo de los padres y su nivel
socioeconómico, y las tendencias sociales como la urbanización, cambios en el
tamaño de la familia, divorcio y un segundo matrimonio— ayudan a moldear el
ambiente familiar y, por consiguiente, el desarrollo de los hijos. (Papalia et al., 2009).
Algo muy
importante para el desarrollo psicosocial también es la atmosfera familiar, ya que según papalia et al (2009) las
influencias más importantes del ambiente familiar sobre el desarrollo de los
niños provienen de la atmósfera dentro de la casa. Esto hace referencia al
“clima psicologico” dentro del hogar, si se es amoroso, comprensivo o por el
contrario si hay una relación distante y poco afectuosa, entre otras. De igual
manera el factor económico dicen Papalia et
al (2009) en su libro “psicología del desarrollo” que influyen grandemente.
Temas
de crianza infantil
Correulacion y disciplina
La tercera infancia conlleva una
etapa de transición llamada corregulación, en la que padres e
hijos comparten el poder. Los padres supervisan el comportamiento del niño,
pero los niños disfrutan de autorregulación en momentos específicos (Maccoby,
1984 como se citó en Papalia et al.,
2009). Se entiende por corregulación a
la etapa de transición en el control del comportamiento en el que los padres
tal como lo expone Papalia et al ejercen
supervisión general y los niños ejercen autorregulación en momentos específicos.
Pobreza y crianza infatil.
Los niños pobres tienen mayor
probabilidad que otros niños de tener problemas emocionales o conductuales, y
su potencial cognitivo y desempeño escolar sufren aún más (Brooks-Gunn, Britto
y Brady, 1998; Brooks-Gunn y Duncan, 1997; Duncan y Brooks-Gunn, 1997; McLoyd,
1998 como se citó en Papalia et al.,
2009). La pobreza puede dañar el desarrollo de los niños por su impacto en el
estado emocional de los padres y sus prácticas de crianza infantil, así como en
el ambiente que crean dentro del hogar (Evans, 2004; NICHD, Early Child Care
Research Network, 2005a como se citó en Papalia et al., 2009).
Estructura
familiar
Por lo general tiempo atrás la
estructura familiar solía estar conformada por padre madre e hijos esto es a lo
que se le conoce como familia nuclear, pero no es el único “tipo” de familia,
existen familias extensas (padres, tíos, abuelos, primos e hijos), familias
monoparentales (solo el padre o la madre) entre otros (Balbuena. Sf:116). Papalia
(2009) de igual manera expone ciertos tipos de familias entre estos la familia
uniparental, la familia en concubinato, la familia compuesta, las adoptivas y
algunas otras que son cada vez más comunes son las formadas por hogares gay o mujeres
lesbianas y las familias encabezadas por los abuelos. (Papalia, et al., 2009:429). Pero que ocurre en cuento
a el infante que vive dentro de estas estructuras familiares mencionadas por
Papalia o los que tienen que presenciar el divorcio de sus padres.
Cuando los padres se divorcian
El divorcio es un suceso
estresante para los niños. Primero está el estrés del conflicto matrimonial y
después el de la separación de los padres y de la partida de uno de ellos, por
lo general el padre. (papalia et al., 2009:430)
Debido a esto los “problemas emocionales o conductuales de los niños pueden ser
un reflejo del nivel de conflicto parental antes del divorcio” (Amato, 2004 como
se citó en Papalia et al., 2009:430).
Teniendo en consideración lo planteado por la autora en su libro “desarrollo
humano” podría decirse que la adaptación del infante al divorcio puede depender
de factores tales como la edad, la madurez e inclusive el género y de igual
manera influyen el temperamento y la capacidad de adaptación emocional. Con
respecto al género a los niños varones les resulta más difícil adaptarse que a
las niñas y son más susceptibles a los problemas conductuales y sociales
(Amato, 2005; Hetherington et al., 1998; Hines, 1997; Parke y Buriel, 1998 como
se citó en Papalia et al., 2009:430).
Familia uniparental.
Las familias uniparentales son
resultado de un divorcio o separación, del hecho de ser padres o madres
solteros, o de la muerte de uno de los padres. (Papalia et al,. 2009).
por lo general, según Papalia et al (2009) aunque los infantes en
familias con un solo progenitor tienen buenos niveles adaptativos y no suelen
presentar anormalidades comportamentales, presentan carencias en los ámbitos
social y educativo, en comparación con sus compañeros que viven con ambos
padres.
Familia en concubinato
Concubinato es definido por la
RAE (S.f) como la “relación marital de un hombre con una mujer sin estar
casados”
Las familias en concubinato son
similares en muchos sentidos a las familias dentro del matrimonio, pero los
padres suelen tener más desventajas. Tienen menos ingresos y escolaridad,
informan relaciones más deficientes y padecen más problemas de salud mental
(Papalia et al 2009:433). De igual
manera expone la autora que las familias en concubinato presentan una mayor
probabilidad de separarse que las familias casadas. En consideración a esto se
podría decir que el infante nacido dentro de esta estructura familiar es más
propenso a presentar carencias en el ámbito social o de cierto modo ser
considerado como vulnerable.
Familia combinada
Se le conoce
como familia combinada a aquella en la cual una persona, bien sea divorciada o
viuda lo cual implica que no tiene ninguna relación de carácter marital con su
antigua pareja, vuelve a casarse, por ende los hijos de ambas partes de la
relación (se los hay) pasan a ser “hijastros” de la nueva relación, en el caso
de que ambas partes tengn hijos estos serán conocidos como “hermanastros”.
Según Amato (2005 como se citó en Papalia et
al., 2009). La mayoría de los padres y madres divorciados se vuelven a
casar y muchas madres solteras se casan con hombres que no son los padres de
sus hijos.
En consideración
a lo que exponen Papalia et al (2009),
puede decirque el el proceso de adaptación ante un padrastro o madrastra causa
de cierta manera un displacer o un grado de estrés en el infante debido a que
estos siguen guardando la imagen de su padre o madre y le tienen un grado de
lealtad a su “ausente” progenitor (bien sea por divorcio o muerte).
Algunos estudios han encontrado que los
niños varones (quienes con frecuencia tienen más problemas que las niñas para
adaptarse al divorcio y para vivir con una madre soltera) se benefician de la
presencia de un padrastro. No obstante, una niña quizá sienta que el nuevo hombre
en la casa es una amenaza para su independencia y para su relación cercana con
su madre (Bray y Hetherington, 1993; Hetherington, 1987; Hetherington et
al., 1989; Hetherington et al., 1998; Hines, 1997 como se citó en
Papalia et al., 2009).
Familias homoparentales (gay o
lesbianas)
Una gran cantidad de
investigaciones han examinado el desarrollo de los hijos de homosexuales y
lesbianas, incluyendo su salud física y emocional, inteligencia, adaptación,
sentido del yo, juicio moral y funcionamiento social y sexual, y han reportado
que no existen preocupaciones especiales (APA, 2004 como se citó en Papalia et al., 2009:433). Por consiguiente,
podría decirse que no existe una diferencia concisa en cuanto a los estilos de
crianza e incluso la salud mental o emocional entre los padres heterosexuales y
los homosexuales.
Familias adoptivas
La adopción de un niño conlleva
retos especiales: integrar al hijo adoptado dentro de la familia, explicar la
adopción al niño, ayudar al niño a desarrollar un sentido sano del yo y quizá
finalmente ayudarle a encontrar y comunicarse con sus padres biológicos
(Papalia et al., 2009:434). Se puede decir que la adopción trae beneficios a nivel
cognitivo según estudios expuestos en Papalia et al (2009:434) que demuestran que los puntajes en pruebas del CI
(cociente o coeficiente intelectual) en infantes que viven dentro de una
familia adoptiva son mayores que los que no.
Relacion con los abuelos
La mayoría de los abuelos que asumen la responsabilidad
de criar a sus nietos lo hacen porque aman a los niños y no quieren que se les
coloque en un hogar sustituto con desconocidos. Sin embargo, la diferencia de
edades puede volverse una barrera y es posible que ambas generaciones se
sientan decepcionadas porque se les priva de sus roles tradicionales (Crowley,
1993; Larsen, 1990-1991 como se citó en Papalia et al., 2009:436)
Algunos de los factores que propician
este tipo de familias en cualquier tipo de sociedad, expuestos por (Allen et al.,
2000 como se citó en Papalia et al., 2009) son:
·
La
migración de los padres a las áreas urbanas para encontrar trabajo.
·
Embarazo
adolescente.
·
Abuso
de drogas.
·
Enfermedad.
·
Divorcio.
·
Muerte
prematura de padre o madre.
Relación con el grupo de pares
En la tercera infancia, tal como lo
dicen Papalia et al (2009) las
relaciones entre pares se vuelven más importantes. Los mismos autores hacen
énfasis en que los grupos se forman de manera natural entre niños que viven
cerca unos de otros o que acuden juntos a la escuela, y a menudo integran niños
del mismo origen racial o étnico y niveles socioeconómicos similares. Por otro
lado cabe resaltar, teniendo en cuenta los aportes de Hartup, (1992) y
Pellegrini et al. (2002 como se citó en Papalia et al. 2009) que “los niños que juegan juntos, por lo general son
de edades similares y de el mismo sexo”.
Efectos
positivos de la relación con los pares según Papalia et al (2009)
·
Se
desarrollan las habilidades necesarias para la sociabilidad e intimidad.
·
Se
adquiere sentido de pertenencia.
·
Se
incrementa la motivación para llevar alcanzar logros.
·
Se
obtiene el sentido de identidad.
·
Se
aprenden habilidades de liderazgo, comunicación, roles y reglas.
·
Al
compararse con otros de su edad, los niños pueden evaluar de manera más
realista sus capacidades y adquirir un sentido más claro de su propia eficacia.
·
Ayuda
al infante a aprender cómo llevarse con los demás en sociedad.
·
Ofrece
seguridad emocional.
Efectos
negativos de la relación con los pares según Papalia et al (2009)
·
Puede
reforzar el prejuicio.
·
El
prejuicio y la discriminación pueden causar un gran daño en la sociabilidad del
infante
·
Los
infantes tienden a presentar preferencias por personas parecidos a ellos.
·
Puede
fomentar tendencias antisociales.
Agresion e intimidación escolar según Papalia et al (2009)
La agresión en esta etapa disminuye en
comparación a la anterior.
Después de los
seis o siete años, la mayoría de los niños se vuelven menos agresivos a medida
que son menos egocéntricos, más empáticos, más cooperativos y más capaces de
comunicarse. Ahora pueden colocarse en los zapatos del otro, pueden comprender
los motivos de otras personas y pueden encontrar maneras positivas de afirmar
su punto de vista (Papalia et al., 2009.
p. 441).
La agresión instrumental que es definida
como aquella que va dirigida hacia un objeto en esta etapa no es tan común, Por
otro lado la agresión hostil que son aquellas acciones que una persona ejecuta
con el fin de dañar a otro incrementa (Coie y Dodge., 1998 como se citó en
Papalia et al., 2009).
Y en cuanto a genero se refiere, los
niños desde temprana edad demuestran ser más agresivos de una manera física
mientras que las niñas presentan un tipo de agresividad más relacional o
social, esto significa que pueden ser más agresivas utilizando palabras sin
necesidad de que estas sean soeces mientras que los niños son más propensos a
infligir daño físico tal como puñetazos o patadas.
Salud mental
Aunque la mayoría de los niños tienen
una adaptación bastante adecuada, según estimaciones recientes, cuando menos
uno de cada 10 niños y adolescentes ha sido diagnosticado con una enfermedad
mental que es suficientemente grave como para producir cierto deterioro
(Leslie, Newman, Chesney y Perrin, 2005 como se citó en Papalia et al., 2009).
Perturbaciones
mentales
Según Papalia et al (2009) una cantidad considerable de infantes presentan
problemas emocionales, de conducta o del desarrollo.
Se informa que
55.7% de los niños con un diagnóstico de problemas emocionales, conductuales y
del desarrollo tienen trastornos de comportamiento perturbador: conducta
agresiva, desafiante o antisocial. Casi todo el resto, 43.5%, tienen trastornos
de ansiedad o de estado de ánimo: sensación de tristeza, depresión,
desamor, nerviosismo, temor o soledad (Bethell, 2005 como se citó en Papalia et al., 2009).
Trastornos de
comportamiento perturbador según Papalia et al (2009)
Imagen extraída de: Desarrollo humano, de la
infancia a la adolescencia. Papalia, D. et
al. 2009.
Fobia escolar y otros transtornos
de ansiedad según Papalia et al (2009)
Algunos infantes tienen razones
realistas para temer acudir a la escuela: un maestro sarcástico, trabajo demasiado
demandante o un intimidador en el patio escolar. En tales casos, es posible que se necesite
cambiar el ambiente y no la actitud del niño (Kochenderfer y Ladd, 1996 como se
citó en Papalia et al., 2009).
Exponen los autores que la fobia escolar puede ser un tipo de trastorno por
ansiedad de separación.
Otros trastornos también expuestos por
los autores son:
·
Fobia
social: el
temor, evitación, o ambos, que se presentan en forma extrema ante situaciones
sociales, como hablar frente a la clase o encontrar a un conocido en la calle
·
Trastorno
de ansiedad generalizada: Estos niños se preocupan acerca de todo:
calificaciones escolares, tormentas, terremotos, lastimarse en el patio de
recreo o la cantidad de gasolina que hay en el tanque.
·
Trastorno
obsesivo-compulsivo: Las personas con este trastorno quizá se obsesionen con
pensamientos, imágenes o impulsos repetitivos y agobiantes (que a menudo
implican temores irracionales) o pueden mostrar comportamientos compulsivos,
como lavarse las manos constantemente, o ambos (APA, 2000; Harvard Medical
School, 2004; USDHHS, 1999b).
Depresion en la niñez según Papalia et
al (2009).
Es un trastorno
del estado de ánimo que hace que los niveles de tristeza aumenten y sobrepasen
los parámetros “normales” convirtiéndose en algo más allá que la tristeza
normal y temporal. La depresión en la niñez puede ser una señal del comienzo de
un problema recurrente que es probable que persista hasta la edad adulta
(Birmaher, 1998; Birmaher et al., 1996; Cicchetti y Toth, 1998; Kye y
Ryan, 1995; USDHHS, 1999b; Weissman et al., 1999 como se citó en Papalia et al., 2009).
Síntomas:
·
Incapacidad
de divertirse o concentrarse.
·
Fatiga.
·
Actividad
o apatía extremas.
·
Llanto.
·
Problemas
de sueño.
·
Cambios
considerables en el peso.
·
Sentimientos
de falta de valía.
·
Sensación
prolongada de falta de amigos.
·
Pensamientos
profundos sobre la muerte o el suicidio.
Referencias
Amezcua,J
y Pichardo, M. (2000). Diferencias de género en autoconcepto en sujetos
adolescentes. Anales de psicología, vol
16(2). Pp. 207-214. Recuperado de: http://revistas.um.es/analesps/article/viewFile/29421/28481
Balbuena,
J. (S.f) La familia, núcleo básico de la sociedad y reflejo de las condiciones
de vida de la población. p.112-119. Recuperado de: http://revistascientificas.una.py/index.php/RE/article/view/743/pdf_54
Castillo,
C., Santader, D., y Solís, M. (2015) Nivel de autoconcepto en niños con
secuelas de quemaduras: Estudio comparativo. Revista Chilena de pediatría. Vol 86(4). Pp 251-256. Recuperado de:
http://www.scielo.cl/pdf/rcp/v86n4/art05.pdf
Ontaneda, M. (2015). Necesidad de incorporar al código civil ecuatoriano en el régimen
familiar, a la familia emplazada y a sus distintas variables: ensamblada por
nuevo matrimonio, y la relación entre los cónyuges, padres e hijos del nuevo
matrimonio, por unión libre posterior al divorcio y la relación entre los
concubinos, los padres e hijos afines (tesis de pregrado). Recuperado de: http://dspace.unl.edu.ec/jspui/bitstream/123456789/8592/1/Martha%20Isabel%20del%20Cisne%20Ontaneda%20Andrade.pdf
Papalia, D., Olds, W., Feldman, R. (2009). Psicología
del desarrollo de la infancia y la adolescencia. México:
McGRAW-HILL/INTERAMERICANA EDITORES, S.A.
RAE.
(s.f.). Real Academia de Lengua Española. Recuperado el 17 de octubre de
2016, de: rae.es: http://www.rae.es/
Teniendo en cuenta lo dicho en la presente entrada cabe resaltar que es importante conocer los factores que influyen en el desarrollo psicosocial del infante entre los 6 y 12 años, y conocer que conceptos tales como el "auto-concepto" y la "autoestima" son importantes en esta etapa para que se pueda dar una buena socialización. De igual modo y siguiendo el orden de ideas que Papalia et al (2009) postulan en su libro puede decirse que existen factores ambientales importantes para el desarrollo del aspecto psicosocial en esta etapa tales como la familia (la atmósfera familiar y el tipo de familia en el que se encuentre) y la relación con los pares (entiéndase por pares a todos los iguales al infante con respecto a su edad).
ResponderEliminarEs igualmente importante conocer que es lo considerado "normal" según lo expuesto por algunos autores para de esta manera lograr tener una idea básica de si un infante se encuentra o no dentro de los parámetros estipulados. También conocer los trastornos es sumamente util para no tomar decisiones arbitrarias y concienciar que por el hecho de que algún infante presente X o Y comportamiento no debe ser "diagnosticado" o catalogado (por personas no especializadas en el tema) bajo ciertos trastornos, o que el hecho de que el desarrollo de un infante no se encuentre al mismo nivel o no vaya a la misma velocidad que el de otro no implica (en el mejor de los casos) un problema o una alteración del desarrollo sino que se da de manera distinta en todos los sujetos debido a la "individualidad del ser".